Alguna vez me dijiste que te hubiera gustado ser musa en mis letras, aquí tienes, lo tenia guardado y había prometido nunca mostrártelo, pero ahora que las cosas mejoraron creo que es propio que lo leas. Ya no tiene sentido, porque creo que cuando uno muere para renacer (metafóricamente hablando) el pasado ya no tiene lugar.
28 de noviembre de 2010
Se me seco la tinta y el papel se termino,
acabaron por escasear los recursos,
el ambiente se hace inaguantable,
las lágrimas sobran en un mar de lágrimas,
siquiera la inspiración termino por abandonarme.
Afuera corre un viento como la primera vez que nos vimos,
anoche sin embargo, también soplo raudalmente,
y con el termino por llevarse lo único,
que por pequeño que fue,
me hizo entera y grandiosamente feliz.
Siento como si me hubieran cortados las alas,
como si hubieran censurado a este corazón.
no quedan mas palabras por decir
incluyendo las que cobardemente enmudecí.
Si algo sirve de consuelo,
el recuerdo de tus labios en los mios,
de tus brazos y mi cuerpo
son marcas en el alma,
imágenes ausentes de olvido,
tan presente lleno de ti,
tan carente de nosotros ahora.
Quisiera que las cosas no se hubiesen sucedidos de tal manera.
Despierto trato de convencerme que es un mal sueño,
algo que sencillamente nunca paso,
pero miro el reloj y los minutos corren,
la realidad es esa frente a mis ojos,
no quiero aceptarla, no voy aceptarla.
No me voy a rendir sin antes intentar al menos luchar por esto que siento.
puede ser que nade contra la corriente,
que mis energías lleguen al limite,
de sentirme agobiado,
de querer abandonarlo,
de que sean esfuerzos en vano,
una lucha sin sentido,
podrá ser eso y mucho mas.
Pero creo que vale la pena intentarlo.
Creo en eso que me enseñaste sin saber,
Leo y releo una y otra vez,
no se lo que escribo, solamente dejo
que mis dedos traduzcan lo que mi corazón te grita.
Ojala pudiera detener el tiempo y volver a ese cálido abrazo
para morir y resucitar mil veces en ti,
para sentir esto que no sentía hace mucho tiempo,
esto que siento y no supe como decírtelo.
La vida es injusta, así como te puso en mi camino
ahora quiere quitarte de el sin piedad.
Me pides que te olvide
y no se como hacerlo.
Tampoco quisiera entender el porque.
Todo esto suena a masoquismo infertil que no lleva a ningún lado
a palabras mal conjugadas, a sustantivos a la deriva de pensamientos que me abandonan
de tu imagen que no desaparece de mis pupilas.
Pídeme lo que quieras, pero nunca me pidas que te abandone sin un motivo justo,
no quieras creer que esto simplemente pasara con el tiempo,
no pretendas hacer que me olvide de ti.
Hoy mas que nunca, la vida me golpeo pero no me mato.
tuvo la oportunidad de llevarme a cometer alguna locura,
pero sin embargo mas allá de verme tirado
nunca le voy a dar el lujo de quitarme esta sonrisa que tu me devolviste.
No alcanzan los argumentos, nunca terminan de alcanzar...
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