lunes, 21 de marzo de 2011

PERDÓN, PERO YA NO TE QUIERO...

a N.

Podría resumir en una gota el inmenso mar de sentimientos que se agitan como suaves olas que van y vienen en cada beso tuyo plasmado en mis labios, conjugando dos palabras de cinco letras que forman el acorde para la justa melodía de lo que este corazón te canta para ti, mi amor.

Esas dos palabras es (digo "es" y no "son", porque la una lo es tanto como para la otra como la suma de vos + yo = nosotros. No dos, sino uno) puente que une nuestras almas y nos lleva volando al infinito como un cometa errante que viaja surcando entre mis sueños y tu mundo.

Podría dibujar con mil pétalos de margaritas, o de rosa, la superficie de la luna con tú nombre y el mio. Pero tal superficie no vasta para abarcar todo aquello que mi corazón tiene para ofrecerte.

Dicen que el deseo en lo prohibido no radica en el hecho o cosa, sino en la prohibición misma. Es por eso que voy a privarme de decir esas dos palabras (tú ya sabes a que me refiero) no por que no las merezcas, todo lo contrario, mereces eso y mucho más -no puedo explicar que hay mas allá del "mucho mas" a menos que extendamos la segunda palabra con varias OOOOO y así hasta terminar por termina todas las infinitas  O existentes-.

En fin, si me privo de decirlas, mejor dicho de decirte, es justamente por eso: deseo de vivir sintiendo esto que tu generas.

Se que, hasta a veces, ni yo me entiendo lo que escribo, pero que bueno, porque no es preciso hacer ciencia de algo tan hermoso que palpita en mis venas.

Resumiendo. Creo que debería haber algo mas allá de esas dos palabras, las cuales ya no son, perdón, un "te quiero", y las cuales no se cuantifican cuando al final de ellas le aumentamos un par de "mucho, mucho, mucho" o simplemente "muchooooooo", por que si bien es cierto, lo mucho termina por abarcar poco lo mucho que realmente siento por ti.

A lo mejor algún día rompa el silencio y pronuncie esas dos palabras, pero para ese entonces ya sera tarde, no por haber pasado su tiempo, sino porque o indirectamente ya tú lo sabrás, o inconscientemente ya lo habré o ya te lo eh-dicho, lo cual es casi seguro...


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